viernes, 5 de marzo de 2010


Ensoñaciones de grandes momentos permiten que nuestra vida cada día encuentre nuevas oportunidades para acrecentar las ganas, los deseos y las esperanzas que enmarcan la apertura de ilusiones que hacen de la noche oscura una puerta a un día luminoso.

Observándolo desde nuestra espiritualidad cristiana, Dios nos regala los espacios para encontrarlo presente dentro de aquellas realidades concretas. Qué mejor oportunidad para reivindicar una opción sintiéndolo presente en su hermosa creación, estando feliz a su lado. Aprendiendo de lo que Él desde nuestra libertad nos deja experimentar.

La invitación de Dios para nosotros, de la cual estoy convencido, es ser camino, ser luz, ser centinela en la cruz, ser confianza al creer. Ser bella experiencia del alma, ser certeza en la calma, ser consuelo en la aflicción, basándonos en la oración, todo por seguirte a Ti, mi Señor.

Bendito Dios, por permitirme conocerte. Bendito Dios, que se hace presente contigo. Bendito Dios, porque en mí tienes un amigo... xD

bretner756

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